¡LA RAÍZ DE TODOS LOS MALES!

«porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores» (1 Timoteo 6:10).

El amor al dinero es fuente y manantial de toda iniquidad. Toda clase de iniquidad o vicio, de una u otra forma, nacen del amor al dinero. Ahora bien, Pablo no dice que el amor al dinero es la única raíz de todos los males existentes, pero si que es una raíz de todos los males o de todo tipo de mal.

1. Raíz de todos los males.

El dinero es raíz de todos los males del mundo. Veamos en general algunos de los males del mundo.

Asómese por la ventana, mire TV, escuche radio, hable con la gente, y verá allí: corrupción, mentira, engaño, robo, trampa, injusticia, prevaricato, opresión, explotación, inmoralidad, perversión, agenda Lgbti, pornografía, pedofilia, prostitución, drogadicción, hijos rebeldes, banalidad, libertinaje, mundo, falsos maestros, reyes perversos, tiranía estatal, egoísmo, amor propio, orgullo, desprecio a Jesucristo y la Biblia. El mundo de hoy, al igual que en tiempos de Pablo, está atestado de toda injusticia, el corazón humano es malvado desde siempre (Rom 1:29-32). Así es nuestra generación, la de los postreros días (2 Tim 3:1-5). Y la Biblia nos dice que el amor al dinero es raíz de todos estos males.

El amor al dinero es raíz para violar los 10 mandamientos (directa o indirectamente). Servirlo es tener otro señor, diferente a Jehová el Señor (Mt 6:24). La avaricia es idolatría (Col 3:5). Los falsos maestros toman su nombre en vano para sacar provecho, hacen mercadería de la Fe (2 P 2:3). Los falsos creyentes abren sus negocios y hacen dinero en el Dia del Señor, no pueden sacrificar sus bolsillos (Neh 13:15-22). El mundo comercia en ese día, obtiene grandes ganancias. Muchos por quedarse con una herencia, deshonran a sus padres, como el Hijo prodigo (Lc 15:11-32). Muchos matan por dinero. Muchos venden sus cuerpos por dinero, otros sacan provecho del adulterio y la fornicación (industria pornográfica). El robo, la explotación, las balanzas falsas, se hacen por el dinero. Muchos levantan falsos testimonios por dinero (Falsos testigos, cobrar un favor).

El 10º mandamiento es la codicia. Tiene que ver con la avaricia, la envidia, la falta de contentamiento, con el amor al dinero (Éx 20:17). Este mandamiento es contra desear cualquier cosa que no nos pertenezca. Es envidiar al prójimo. Aunque ninguna ley castiga la codicia en sí, Dios si la condena en su Ley (Rom 7:7). El mundo alimenta la codicia, los deseos de los ojos (1 Jn 2:16). Wall Street y el mundo en general nos enseña que la codicia es buena, las empresas utilizan la obsolescencia programada para generar más ingresos, el Tele-evangelismo, con su falsa Teología de la Prosperidad, alimenta la codicia de los incautos. El criterio de los jóvenes para escoger una profesión es simplemente que “dé más plata”.

Políticos, grandes industrias, las alianzas entre ellos, concesiones, trampas, explotación, se hacen para sacar provechos económicos. Quieren ocuparlo todo, de nada les sirven sus riquezas, son unos miserables (Is 5:8). Los ricos codiciosos son descritos por Job (Job 20:15-21). Sus ojos nunca se sacian, en vano trabajan duro, es vanidad (Ecl 4:8). Los ricos opresores serán juzgados terriblemente, que nunca sean nuestros modelos (Stg 5:1-6). Su destino será la condenación eterna, no sigamos sus pasos, pues llegaremos a su mismo destino (Job 20:22-29). Por eso Cristo dijo que era más fácil que un camello pasara por el ojo de una aguja, que un rico entrara en el reino de los cielos, pues sus riquezas no los dejaban seguir a Cristo, como el joven rico (Mt 19:22-24).

Satanás tentó a Cristo con las riquezas (Mt 4:8-9). Satanás tienta al hombre con las riquezas (1 Tim 6:9). Tengamos cuidado hermanos, porque el amor al dinero es raíz de todos los males, y el Diablo lo sabe.

2. Ejemplos de amor al dinero.

El amor al dinero es raíz de todos los males, llevó a muchos a otros pecados, a traicionar al Señor, su amor por éste los llevó a la apostasía.

Balaam, aunque el Señor se lo impidió, amó las dadivas de Balac que le habían traído para maldecir a Israel (Núm 22:7). Amó el premio de la maldad (2 P 2:15-16). Se lanzó por lucro en éste error (Jud 1:11). Muchos pastores y líderes religiosos callan o tuercen la verdad por una posición, estatus, reconocimiento, publicidad, ingresos, son maldición para el pueblo de Dios como Balaam. Judas cambió a Cristo, la Perla de Gran Precio, por 30 sucias monedas de plata (Mt 26:14-16; Lc 22:48). Muchos traicionan al Señor por dinero, buscan posesiones, comodidades, deleites. El joven rico prefirió sus riquezas a Cristo, no las dejó, por su amor al dinero, no quiso seguir al Señor (Mc 10:21-25). Muchos no están dispuestos a sacrificar sus posesiones, recursos, placeres y comodidades. El rico no tuvo misericordia del pobre Lázaro, se deleitó en las riquezas (Lc 16:19-21). Las riquezas deben ser para ayudar y compartir, debemos ser austeros. Ananías y Safira por quedar bien ante los hombres, dieron menos de lo prometido, mintieron al Espíritu Santo, fueron fulminados por Dios (Hch 5:1-11). La avaricia nos puede llevar al engaño hipócrita.

El Rico de la parábola de Natán no quiso tomar de sus muchas vacas y ovejas, y robó al pobre la única corderita que tenía (2 Sam 12:2-4). Explotar, aprovecharse, sacar ventaja, la tacañería, es hacer igual. El rico insensato hizo tesoros para sí, su confianza estaba en sus bienes terrenales, eran su paz y seguridad (Lc 12:15-21). ¿Lo que le da paz, es un buen trabajo, ascenso, posesiones, propiedades? ¿Corre, se levanta cada día por esto? No siga corriendo por lo que perece, no sea necio, esta noche el Señor podría venir por su alma. El que fue sembrado entre espinos, está afanado por lo terrenal, está en el engaño de las riquezas, no da fruto (Mt 13:22). ¿Le roba su paz estar sin dinero, trabajo, un sueldo escaso? ¿le cambia su estado de ánimo? Es infructuoso, en grave peligro de ser desechado, será cortado tarde o temprano. Algunos en un juicio terrenal pueden vender por dinero al justo, Dios no revocará nuestro castigo (Am 2:6). Lo podemos hacer por conservar un trabajo, dinero, comodidad, posesiones. ¡Cuidado! En muchas iglesias se hace acepción de personas, se prefiere al rico sobre el pobre, por interés (Stg 2:2-4). Exaltan al rico, respetable, famoso, poderoso. Si hacemos distinciones y nos deslumbran ellos, somos transgresores (Stg 2:6).

Estamos en grave peligro de tentación y lazo. No sigamos estos ejemplos, nos llevarán a mas pecados. “porque raíz de todos los males es el amor al dinero…”.

3. ¿Codicia o contentamiento?

¿Codiciaremos riquezas cuando de allí vienen todos los males? ¿Queremos acaso males? Vendrán muchos dolores si hacemos eso ¿Nos extraviaremos de la fe? Debemos estar contentos con lo que tenemos, sea mucho o poco (1 Tim 6:6-10; Heb 13:5). En toda situación, en abundancia o escasez (Fil 4:11-13). Que el Señor nos dé el pan necesario (Prv 30:8-9). Con sustento y abrigo es suficiente (1 Tim 6:8).

¿Por qué correr tras las riquezas? ¿Para qué las quiere? Nunca sacian, solo traen aflicción, tendrá muchos dolores, el que ama el dinero nunca se saciará, no las desee, le vendrán más problemas, aflicciones; recuerde que al rico no lo dejan dormir sus riquezas (Ecl 5:10-17). No se afane por enriquecerse, las riquezas al final son nada, se van (Prv 23:4-5). Y si algún día llegan riquezas a sus manos, o si hoy las tiene, no ponga allí sus esperanzas, mire al cielo (1 Tim 5:17-19).

Sigamos los ejemplos de hombres fieles que se despojaron de sus bienes, por el Señor. Zaqueo se despojó de sus riquezas, entregó la mitad de sus bienes, e hizo restitución (Lc 19:8-9). ¿Se ha despojado (por Cristo) de dinero, posesiones, ha restituido? ¡Ha llegado la salvación a su casa! Pedro y los discípulos dejaron todas sus posesiones por Cristo (Mt 19:27-29). ¿Está dispuesto a hacerlo? ¿Ha dejado todo-algo por el Señor? Él nos recompensará, recibiremos mucho más. Pablo consideró todo lo que tenía por basura, y él sí que tenía mucho que dejar (Fil 3:7-8). ¿Considera todo lo que tenía por basura? ¿títulos, posesiones, estatus, respeto? ¡Ha ganado a Cristo!

¡No codiciemos la raíz de todos los males! Hay tentación y lazo de Satanás, podemos apostatar (Hab 2:9). No codicie, pues será destruido. ¡Ay de usted si es un codicioso! Pues si usted ama el dinero, cuando venga la Bestia a obligarlo a marcarse, usted sucumbirá, para poder comprar y vender (Ap 13:16-17). Al final de los tiempos muchos estarán corriendo tras el dinero, como en los días de Noe y Lot (Lc 17:28-29; Mt 24:38-39). Haga morir su idolatría por el dinero, todo lo terrenal, eso es del hombre no regenerado (Col 3:5-7). ¡Ay de usted si pretende servir a Cristo, amando la raíz de todos los males! No puede servir a otro señor (Mt 6:24).

No codicie, no ame el dinero, Cristo es infinitamente mejor, no siga los ejemplos de Balaam, Judas, Demas, de las parábolas e historias de los ricos codiciosos de la Biblia, nada le servirá alcanzarlo, solo le traerá problemas, dolores, aflicciones, temporales y eternas, como a ellos; conténtese con lo poco o mucho que Dios le ha dado, agradezca, siga los ejemplos de Zaqueo, Pedro, Pablo, Moisés, Abraham, entre otros, de la iglesia primitiva, no siga el ejemplo del mundo, corte la raíz de todos los males. “porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores”.

X SU GRACIA: Comunidad Cristiana.

Escucha el sermón del domingo (28 de Marzo de 2021): «¡LA RAÍZ DE TODOS LOS MALES»