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¡TODA CARNE ES COMO HIERBA!

«Porque: Toda carne es como hierba, Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba. La hierba se seca, y la flor se cae; Mas la palabra del Señor permanece para siempre. Y esta es la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada» (1 Pedro 1:24-25).


El hombre en su máximo esplendor y gloria, es aún una criatura que se marchita, desvanece y muere. Llega al mundo, vive, crece y muere, es semejante a la hierba. En toda su gloria, es como la flor de la hierba. Su ingenio, belleza, fuerza, vigor, riqueza, honor, son como la flor de la hierba, pronto se marchita y muere. Pero la Palabra de Dios, y todo lo que tiene que ver con su Reino (Cielo, Gloria de Dios, Su pueblo), permanecen para siempre. El hombre es pasajero en la tierra, pero no después de morir, su alma es eterna (salvación, condenación).


1. LOS JUDÍOS EN CAUTIVERIO.


Pedro apela a las Escrituras del Antiguo Testamento, cita Isaías 40:6-8 para comprobar y afirmar su enseñanza.


HAY PROMESAS DE CONSUELO A SU PUEBLO CAUTIVO (Is 40:1-3). “Antes que Dios enviara a su pueblo al cautiverio, les proporcionó preciosas promesas para su apoyo y consuelo en sus problemas en ese día nublado y oscuro (gran utilidad, luz gloriosa). Ayudó a secar sus lágrimas junto a los ríos de Babilonia” (Matthew Henry). SE MANIFESTARÍA LA GLORIA DE JEHOVÁ (IS 40:5). “Cuando los cautivos estén preparados para la liberación, Ciro lo proclamará, y el Señor despertará con coraje/resolución para romper los desánimos que yacen en su camino, y hacer nada las colinas, valles y todo lugar escabroso” (Matthew Henry). LA VANIDAD HUMANA (IS 40:6-8). “Para preparar el camino del Señor debemos estar convencidos de la vanidad de la criatura. Toda carne es hierba, débil y marchita” (Matthew Henry). SE ANUNCIAN BUENAS NUEVAS A SIÓN (Is 40:9-11). “Será revelado a Sion y Jerusalén; se dará noticia de ello al remanente que haya quedado en Sión y en Jerusalén, a los pobres de la tierra, que eran labradores de viña... Sión mora con la hija de Babilonia (Zac 2:7); y allí recibe noticia de la proclamación de gracia de Ciro” (Matthew Henry). SE MUESTRA LA GRANDEZA DE DIOS Y LA PEQUEÑEZ HUMANA (IS 40:12-17). “Todos los seres humanos se reducen a nada comparados con el Creador… Las naciones, comparadas con Él, son como gota que queda en el balde, comparadas con el vasto océano; o como menudo polvo en la balanza, que no la mueve, comparado con toda la tierra” (Matthew Henry).


Así Pedro,usa la ilustración de la hierba y las flores para subrayar el contraste entre el hombre temporal y la permanente Palabra de Dios (V22-25). Habiendo hablado del hombre espiritual renovado, nacido de nuevo, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, ahora presenta la vanidad del hombre natural, tomándolo con todos sus ornamentos y atavíos. Contrasta la excelencia del hombre regenerado, con la vanidad del hombre natural. Su vida en esta tierra es como la hierba, como la flor de la hierba, pronto se marchita y muere.


2. EL HOMBRE ES PASAJERO.


“La fragilidad del hombre se compara con la hierba que hoy está aquí y mañana no. La belleza de la flor es de corta duración, especialmente en climas tropicales; así es la gloria que el hombre emana a causa de sus talentos, logros o riquezas. Los vientos de cambio soplan y rápidamente quitan toda gloria y honor” (Hendriksen & Kistemaker).


EL HOMBRE ES PASAJERO. El hombre es como la flor y la sombra, corto de días, pasa (Job 14:1-6). Es polvo, como hierba y flor del campo, perece (Sal 103:14-16). Es como la hierba del campo, la hortaliza verde, como la hierba en los terrados, se marchita (2 Ry 19:26). Es como sueño, como la hierba de la montaña, termina, se seca (Sal 90:5-6). Es neblina que se desvanece (St 4:13-14). El hombre es pasajero en la tierra, viene y va, venimos y vamos (hombre, mujer, niño, rico, pobre, poderoso, débil, blanco, negro, libre, esclavo). Cada hombre, tarde o temprano, saldrá de este mundo.


LOS MALOS SON PASAJEROS. Son como el tamo que arrebata el viento (Sal 1:4). Los impíos se secarán, los que no se han entregado a Cristo, serán cortados (Sal 37:1-2). Los que aborrecen al pueblo de Dios, todos sus perseguidores, la falsa iglesia, el Anticristo, la Bestia, el Estado humanista, el impío, se secarán como la hierba, perecerán (Sal 129:5-6). Aunque broten como la hierba, aunque que vayan por el camino espacioso, con las muchas aguas, será para su destrucción (Sal 92:7). Los gobernantes y sus ideologías perecerán (Sal 146:3-4). Emperadores, reyes, presidentes, Estadistas, caudillos, lideres políticos, con todas sus ideologías, filosofías, pensamientos, morirán, pasarán al olvido, serán destruidos. Los imperios mundiales descritos por Daniel serían desmenuzados (Dn 2:35, 43-45). Babilonia, Medo-Persas, Griegos, el Imperio romano, y la Gran Babilonia, fueron y serán destruidos. La trinidad Satánica (Diablo, Bestia, Falso profeta), será lanzada al lago de fuego (Ap 20:10). Todos ellos, están solo engordando para el día de la matanza, creados para el día malo (Pr 16:4). Satanás, el Anticristo, la ramera, los gobernantes impíos, les espera el infierno. Pero también a usted, que no se ha entregado a Cristo, que no ha nacido de nuevo, irá al mismo lugar de ellos (Mt 25:41).


EL MUNDO, LO MATERIAL, ES PASAJERO. El mundo y sus deseos son pasajeros (1 Jn 2:17). Las riquezas son temporales (Lc 12:15-21). El rico pasará junto con sus riquezas (St 1:9-11). La provisión material perece (Jn 6:26-27). Correr por lo material, el dinero, las riquezas, es incredulidad (Mt 6:30). Todas esto perece, son tesoros que la polilla y el orín corrompen, y que los ladrones minan y hurtan (Mt 6:19). La vida es pasajera hermanos (Mt 16:25-26), no podemos preocuparnos más de las cosas pasajeras que de las eternas.


El hombre, lo material, este mundo y todo lo que hay en él, reyes, reinos, imperios, ideologías, filosofías, religiones, son pasajeras, todo lo que vemos pasará. Todo lo que el hombre hizo, alcanzó o acumuló, material y terrenalmente, toda su gloria terrenal, de nada le servirá, no llevará nada a la tumba, no las llevará a la eternidad. ¿Por qué entonces vivimos tras estas cosas?


Este mundo pasará, será destruido, vivamos santa y piadosamente (2 P 3:11). Somos pasajeros en esta tierra, tarde o temprano saldremos de acá, y daremos cuentas al Señor (Heb 9:27).


3. LA PALABRA DE DIOS PERMANECE PARA SIEMPRE.


“El Evangelio continúa, revela riquezas duraderas, el honor con Cristo; la verdadera sabiduría y fuerza en él, y conocimiento espiritual. En comparación, todas las otras cosas son escoria y estiércol” (Matthew Henry).


“MÁS LA PALABRA DE DIOS PERMANECE PARA SIEMPRE”. Aunque el hombre muera (justo e injustos), y el mundo sea incierto, inestable, fugaz, pasajero; sin embargo, la palabra del Señor, el Evangelio de Cristo, permanece para siempre, nunca pasará. Dios permanecerá para siempre (Sal 102:12). Sus años no acabarán (Sal 102:26-27). También su palabra permanecerá en el cielo y la tierra (Sal 119:89-90). Cielo y tierra pasarán, pero su palabra no pasará (Mt 24:33-35). Su palabra no está abolida, toda ella se cumplirá (Mt 5:17-18). Nada será frustrado de su Ley (Lc 16:17). La palabra eterna puede dar al que es como la hierba y su flor, vida eterna (V23).


“Y ÉSTA ES LA PALABRA QUE POR EL EVANGELIO OS HA SIDO ANUNCIADA”. La palabra de Dios en Isaías es la misma de Pedro, es el mismo Evangelio predicado por él y los demás apóstoles. Son las buenas nuevas que trae Sión (Is 40:9), el mismo Evangelio de las buenas nuevas de Cristo que predicaron los apóstoles, aunque con mayor claridad y éxito. Esta también es la misma palabra que nosotros predicamos (Ro 10:8-10). Miremos lo que permanece para siempre, no lo que perece (Col 3:1-2). Corramos por lo que permanece para siempre, no por lo que perece (Jn 6:27). Hagamos tesoros en lo que permanece eternamente, no en lo que se corrompe y pierde (Mt 6:19-20). Este mundo será desecho y quemado, esperemos lo eterno (2 P 3:12-13). Cuide su alma, que es eterna, no la pierda por lo que se desvanece (Mt 16:26).


Como la hierba y la flor del campo, pronto usted se desvanecerá; pero su alma perdurará para siempre, en condenación o salvación eterna. ¿Dónde estará? Acá su carne puede alcanzar la gloria, pero allá su alma, alcanzará vergüenza y confusión perpetua (Dn 12:2). Acá podrá ser como la hierba y la flor del campo, pero su alma, podrá alcanzar gloria, honra e inmortalidad (Ro 2:6).


Vivimos poco tiempo, pronto partiremos de acá. ¡Toda carne es como hierba! “Porque: Toda carne es como hierba, Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba. La hierba se seca, y la flor se cae; Mas la palabra del Señor permanece para siempre. Y esta es la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada”.



X SU GRACIA: Comunidad Cristiana.


Escucha el sermón del domingo (23 de Julio de 2023): «¡TODA CARNE ES COMO HIERBA!».



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